Cuando la señal de RCTV fue cerrada el 28 de mayo del 2007 pasé uno de los días más horribles de mi vida. Pero si esa noche fue horrible, pues imagínense el "día después". Tener que trabajar el 29 en esas condiciones es lo peor.
Se que mucha gente en este país ha vivido situaciones similares con sus empresas, pero, como aparentemente nosotros en RCTV tenemos más karma que el común de la población, a mis compañeros y a mi nos ha tocado vivir esto dos veces.
Sin embargo este "día después" fue muy diferente. Definitivamente la experiencia hace la diferencia.
Había un ambiente de nerviosismo, de sorpresa, de expectativa, además veíamos las manifestaciones por televisión en La Cota 1000, en Las Mercedes. El twitter reventado de noticias cada una peor que la otra. Sentimos como la otra vez el apoyo de la gente, lo cual hablamos como algo que nos obliga a trabajar aún con más entrega.
Pero trabajar en novela no es que te da mucho tiempo para pensar. Grabamos nuestras escenas con lágrimas, peleas, abrazos, una le pidió el divorcio a otro, y otro más se reconciliaba con la mujer que engañó (estamos en los capítulos finales)... y así, poco a poco, nos fuimos dando cuenta de la gran fortuna que teníamos de, aunque solo fuese por un día más, poder grabar nuestra novela como lo hacemos todos los días de lunes a sábado. Una cosa que llegamos a pensar era imposible. No faltó ni una persona. Todo funcionó como siempre.
Este "dia después" tiene una gran diferencia. Nosotros sabemos que nos vamos a levantar, porque ya lo hemos hecho antes.
Se que mucha gente en este país ha vivido situaciones similares con sus empresas, pero, como aparentemente nosotros en RCTV tenemos más karma que el común de la población, a mis compañeros y a mi nos ha tocado vivir esto dos veces.
Sin embargo este "día después" fue muy diferente. Definitivamente la experiencia hace la diferencia.
Había un ambiente de nerviosismo, de sorpresa, de expectativa, además veíamos las manifestaciones por televisión en La Cota 1000, en Las Mercedes. El twitter reventado de noticias cada una peor que la otra. Sentimos como la otra vez el apoyo de la gente, lo cual hablamos como algo que nos obliga a trabajar aún con más entrega.
Pero trabajar en novela no es que te da mucho tiempo para pensar. Grabamos nuestras escenas con lágrimas, peleas, abrazos, una le pidió el divorcio a otro, y otro más se reconciliaba con la mujer que engañó (estamos en los capítulos finales)... y así, poco a poco, nos fuimos dando cuenta de la gran fortuna que teníamos de, aunque solo fuese por un día más, poder grabar nuestra novela como lo hacemos todos los días de lunes a sábado. Una cosa que llegamos a pensar era imposible. No faltó ni una persona. Todo funcionó como siempre.
Este "dia después" tiene una gran diferencia. Nosotros sabemos que nos vamos a levantar, porque ya lo hemos hecho antes.
EN LA FOTO LA IMAGEN DEL OBSERVADOR QUE AL IGUAL QUE TODA LA PROGRAMACIÓN SE TRANSMITÍA EN LA RED INTERNA DEL CANAL. CON UN INSERT PARA QUE LOS OTROS PAISES SEPAN LO QUE SUCEDIÓ EN VENEZUELA.
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